martes, julio 10, 2007

Jamaica: No problem!


Más que una crónica para las que no tengo el talento suficiente, les dejo una presentación con algunas imágenes de unos días que nos tomamos en familia para disfrutar de unos días de absoluto descanso en una sensacional isla del Caribe.

Algunas fotos son simples retratos de una familia común en vacaciones, otras son algunas estampas de curiosidades de una cultura que profesa el no problem como filosofía de vida. Para un indio guane como yo, no deja de causar extrañeza y admiración el que todo un país conduzca sus carros con el volante a la derecha y el tráfico avance por el carril izquierdo y no por el derecho como acostumbramos en la mayoría de los países. Curiosidades triviales dirán ustedes con toda razón.

Estuvimos en un hotel donde se puede ver y medirle el pulso a un verdadero crisol de razas. Negros, indios (de la India), blancos muy blancos, latinazos de esos con el camafeo colgante tipo Daddy Yanqui, franceses, brasileños, portugueses, canadienses, argentinos y españolas haciendo topless... irlandeses asistiendo en masa a una boda durante toda una semana y hasta una pareja de amish en luna de miel; era como ver una versión posmoderna en vivo de la Familia Ingalls. Pero sin duda alguna, el gran mercado de Jamaica está en el turista de Estados Unidos. Por lo menos un 80% de los huéspedes procedía de allá. Una deliciosa Babel, una New York chiquita.

La comida en este tipo de centros es impresionante en calidad y cantidad. Vi a un sujeto cuyo único propósito era atragantarse. En los ocho días que coincidimos siempre lo veía en alguno de los restaurantes, sirviéndose unos sandwichs de siete pisos tipo Lorenzo Parachoques... Creo que hasta raviolis le metía. Mientras latinazos como yo íbamos detrás de los jamones en sus distintas presentaciones, gringos y japoneses, sobre todo estos últimos, se desvivían por las frutas que para mí eran paisaje y ombligo de toda mi indiferencia. Los desayunos eran momentos en los que uno distinguía a los amigos 'gringos' porque colmaban las filas para pasar a recoger sus paladas de bacon (tocineta en tiras) y los japoneses corría detrás del kiwi y los bananos.

En fin les dejo las fotos y las crónicas de Victi y de Gaby. Ah, y un corto video.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Momentos para recordar que son las vacaciones, don Víctor.
Acabo de ver su twitter y me doy cuenta que después del descanso viene el trabajo acumulado pero seguro que valio la pena esa semana en Jamaica.
Salu2